Cuando se trata de hacer tratamientos que requieran de aislamiento intraoral, existen tres instrumentos imprescindibles para concretar esta tarea y son: el dique de goma, arco de Young y, por supuesto el Clamp dental, del cual te contaremos todo lo que necesitas saber sobre ellos en este artículo.

¿Qué son los clamps dentales y para qué sirven?

Los clamps dentales son unas abrazaderas metálicas con un diseño especial que se adaptan a la forma de la corona clínica y permiten adaptarse al diente en su zona cervical. La manera de inserción para su uso es empleando un porta-clamps o fórceps especial que consigue abrir el clamp al insertar la pinza dentro de los dos orificios laterales.

La principal función de un clamp dental es sujetar el dique de goma, que es una lámina elástica que se coloca alrededor del diente o los dientes que se van a tratar, creando una barrera física que aísla el campo clínico de la saliva, la sangre y otros fluidos.

El dique de goma se perfora con un perforador de diques, que hace un agujero sobre la goma, y gracias a su elasticidad, se adapta a la anatomía de cada diente y sus particularidades.

Por último, el arco de Young es un alambre metálico que se engancha al clamp dental y al dique de goma, y que aporta la tensión necesaria para mantener el campo clínico estable de forma extraoral y conseguir el aislamiento por completo.

El uso de estos tres elementos se conoce como aislamiento absoluto o relativo, dependiendo de si se aísla un solo diente o un grupo de dientes, y es una técnica muy recomendable para realizar diversos tratamientos dentales, como endodoncia, restauración, blanqueamiento, sellado de fisuras, entre otros.

¿Qué ventajas tienen los clamps dentales?

Ya que sabemos qué es un clamp dental, repasemos algunos de los beneficios de su uso al momento de realizar tratamientos en la cavidad bucal. Lograr el aislamiento del campo clínico, tienen múltiples beneficios, tanto para el profesional como para el paciente, y algunos de estos beneficios son:

  • Evitan la contaminación del campo clínico por saliva, sangre u otros fluidos, lo que mejora la calidad y la duración de los tratamientos dentales, especialmente los que requieren un entorno seco, como la restauración con composite o la adhesión de brackets.
  • Evitan el contacto del paciente con sustancias irritantes, como el hipoclorito de sodio en la endodoncia o los peróxidos en el blanqueamiento, lo que reduce el riesgo de reacciones adversas o alérgicas gracias al clamp dental.
  • Evitan la ingestión o aspiración de cuerpos extraños, como limas, brocas, materiales de obturación, entre otros, previniendo así complicaciones graves como la asfixia o la infección durante el procedimiento.
  • Mejoran la visibilidad y el acceso del profesional al campo clínico, lo que facilita la realización de los procedimientos y reduce el tiempo y el estrés.
  • Detienen la hemorragia sobre el campo clínico, al ejercer una presión que constriñe los tejidos blandos y los vasos sanguíneos, lo que evita el sangrado excesivo y la formación de coágulos.
  • Funcionan como una barrera psicológica para el paciente, al proporcionarle un mayor confort, evitarle el atragantamiento con el agua o el contacto con la lengua, y hacerle sentir más seguro y tranquilo, dejando a un lado la molesta sensación de ahogo que puede acarrear la visita al dentista.

¿Qué tipos de clamp dental existen y cómo se clasifican?

El uso del clamp dental es sumamente beneficioso e imprescindible al momento de intervenir odontológicamente, sin embargo, no todos son iguales ni se utilizan de la misma forma.

Existe un tipo de clamp dental según diferentes criterios como la forma, el tamaño, el diseño, el material o color del mismo, por ello, hemos preparado esta breve clasificación.

Según la forma

De acuerdo con la forma, un clamp dental puede clasificarse como clamps ovalados, circulares, rectangulares o especiales.

  • Los clamps dentales ovalados se adaptan a la mayoría de los dientes, mientras que los circulares se usan para molares con una circunferencia de base más grande.
  • Por su parte, un clamp dental rectangular suele emplearse para dientes con una forma más cuadrada, como los incisivos.
  • Por último, los clamps dentales especiales se diseñan para casos particulares, como dientes parcialmente erupcionados, con trauma oclusal, con caries extensas, con coronas o puentes.

Según el tamaño

En lo que refiere al tamaño, un clamp dental puede clasificarse como pequeño, mediano o grande.

  • Los clamps dentales pequeños se usan para dientes anteriores, como los incisivos o los caninos.
  • Los clamps dentales medianos se usan para dientes posteriores, como los premolares o los molares superiores.
  • Los clamps dentales grandes se usan para molares inferiores, que suelen tener una base más ancha.

Según el diseño

En cuanto a su diseño, se pueden distinguir clamps dentados o lisos, con o sin alas, y con el arco distalizado o no. Los dentados tienen el borde serrado, lo que les permite una mayor retención sobre la superficie dental, mientras que los lisos tienen el borde liso, siendo más cómodos para el paciente.

Por otra parte, los clamps dentales con alas tienen unas extensiones laterales que facilitan su colocación y sujeción con el porta-clamps, en comparación a aquellos sin alas que no tienen estas extensiones, lo que les hace más discretos y estéticos.

Los clamps dentales con el arco distalizado tienen el arco desplazado hacia la zona distal del diente, lo que les permite adaptarse mejor a los molares inferiores, y, por último, los que no tienen el arco distalizado tienen el arco centrado, lo que les hace más versátiles para otros dientes.

Según el material

Se pueden diferenciar clamps dentales de acero inoxidable o de níquel-titanio. Los primeros son los más usados, por su resistencia, durabilidad y bajo costo, mientras que los de níquel-titanio son más flexibles, elásticos y biocompatibles, lo que les hace más adecuados para casos difíciles o pacientes alérgicos al metal.

Según el color

Esta distinción responde también a la estética y el material, puesto que los de colores suelen ser de un material distinto al metal, que como ya señalamos, son los más tradicionales, pero pueden reflejar la luz y dificultar la visión.

Los clamps dentales de colores son más modernos, y pueden tener diferentes tonalidades, como azul, verde, rojo, amarillo, entre otros, que pueden ayudar a identificar el tipo y el tamaño del clamp dental, así como a mejorar la estética y la aceptación del paciente.

Aunque las clasificaciones pueden ser mucho más extensas y detalladas, esta es la información fundamental para comprender el uso de este instrumento y sus particularidades. Si quieres conocer más sobre instrumentos y procedimientos dentales, no dudes en seguir el contenido de nuestro blog.